miércoles, 27 de febrero de 2008

Nooooo,

No, no, espérate un poquito, yo nunca dedico canciones, pequeña amiga. No tengo escrito el nombre de nadie bajo mis párpados. No me esperan en la tarde para comer o tomar el té. No tengo dos sino que un cepillo de dientes en el baño. No me queda ni sal, ni azúcar, ni arroz. El refri está en ruinas. No tengo casi nunca las ventanas abiertas. No me paro a esperar un bus. No tengo música rápida. No tengo escoba, aspiradora o plumero nuevos. No tengo más que dos botellas de vino, tres copas, cuatro vasos.
No tengo la alfombra roja porque se apolilló. No puedo creer cuando llegan cartas. No tengo un sólo peso en el bolsillo. No tengo los controles remotos con pilas. No tengo una caja de fotos. No tengo las llaves de la casa ordenadas en llaveros. No tengo para qué darme vuelta en la cama y decir buenos días. No tengo para qué dejar abierta la puerta de la cocina...de todos modos no vendrán ricos aromas. No tengo ni un pequeño recuerdo del mar. No tengo ganas de dibujar. No tengo sueño por hoy. No tengo las manos apiladas entre cartas con mi nombre mal escrito. No tengo viento que quiera atravesar por mi casa. No tengo envidia. No tengo plantas, abrelatas, ni paltas para el desayuno. Dirás que soy miserable, que soy avaro, que no tengo idea de hogares. Pero al menos me acuesto tranquilo y no tengo que tapar mis sueños con mentiras.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A esa canción no se pueden agregar ni sacar más palabras......... y Bach tb ha formado parte de mi vida jajajajaj saludos!!!!!! y gracias por el post....

Ro dijo...

Te escribo para darte las gracias por el comentario en mi blog. Soy Ro, la de la vida en blanco..jajaja.
El tuyo, perfecto...