domingo, 4 de febrero de 2007
Deuda divina
Dios: ¿qué quieres ahora?
Pecador: Osea, igual...lo mismo de siempre. Me mande una cagada...
Dios: Lo siento, justo se me acabó el perdón...
Pecador: ya poh, si no es pa tanto. Además igual pongo plata en la Iglesia
Dios: Ah!!! osea te creí mi abonado??
Pecador: No, poh, don Cristo, no lo tome así...
Dios: Dime padre y la boca tuya de y de mil generaciones queda donde mismo
Pecador: Pucha padre, que violencia
Dios: Violencia??? Quieres saber de violencia???
Pecador: Ya oh, no me perdone na sino quiere
Dios: No te hagas el ofendido cabrito, mira que ando con jaqueca y capaz que yo reaccione mal
Pecador: Ya le dije ya, no se lo tome así
Dios: Ya mejor cuentame tu condoro.
Pecador: Es que le robé la joyas a mi mamita
Dios: Chuuuuuuuu
Pecador: Si poh, se me pasó la mano, no ve que con la "pasta" pasa eso...
Dios: Te pasaste, vos si que te pasaste...
Pecador: Si se poh, si no no estaria arodillado acá
Dios: Y pa ma anda borracho. Te diste cuenta que estas arrodillado en la línea del tren
Pecador: Guaaa, la volaita, no caché na poh!!!
Dios: Ya hagámosla corta. Vay a quedar endeudado, pero te perdono.
Pecador: Y cual sería la deuda?
Dios: Vai a tener que dejar el copete y la droga
Pecador: Transemos
Dios: Insolente!!!!
Pecador: Ya gueno ya, dejo todo
Dios: Así esta mejor Yo quiera que sea verdad
Pecador: Si tatita si lo será
Dios: Ve en paz
Pecador: Ya chabela
Dios: Ami!!! o Adiós, como quieras...
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